domingo, 28 de octubre de 2012

Que si nazco o que si muero.

Lo efímero de la vida se mide en sonrisas,
que no todos los días son grandes ni las noches pequeñas.

Adelanto o me acerco, a la brisa, a la mano

de quien quiero ser,
                              de quien soy,
                                               o de quien quiero.

¡Qué importa! Decían,
que si importa, si yazco
entre el suero de un alma ceñida a las lágrimas
que hace ya no anhelo.